Provengo de una familia en la cual apenas han existido nunca contactos físicos entre sus miembros. Al día de hoy, cuando nos encontramos y nos besamos, nos damos esos pseudo besos en la mejilla que se dan al aire, que no sobre la piel.
Por supuesto jamás el menor abrazo sentido, achuchón, o menos todavía alguna caricia.
Ósea cero contacto físico. No fue hasta ya de adulta, entorno a los 20 años que descubrí no era lo corriente en cuanto a relaciones, y que la gente que se quería, se tocaba, sin miedo.
Esa falta de “toqueteo” es algo que siempre me causó una tremenda desazón, y de hecho, en mi mundo actual, ocurre todo lo contrario: abrazar un ser querido, darle un micro masaje en el cuello cuando pasas a su lado, o cualquier otra muestra de afecto a través del cuerpo siempre me resulta vital, en el sentido más literal de la palabra, y no es ninguna peculiaridad, sino un elemento fundamental en la vida de todo ser
Existen centenares de estudios publicados en estos últimos 50 años acerca del crecimiento/comportamiento de bebés que aportan pruebas consistentes en cuanto a la relación entre contacto físico y desarrollo: los bebés acariciados, masajeados y abrazados, es decir que reciben amor a través del cuerpo, se desarrollan más rápidamente y de forma mucho más harmoniosa respecto a los que apenas son agraciados el menor contacto físico.( http://lasillarota.com/se-solicitan-voluntarios-para-abrazar-bebes#.WJfWB5JkBsM) Algunos de estos últimos pudiendo hasta rozar la delicada línea vida/muerte al verse privados de dicho alimento etérico: el tacto divino, el Amor….
Es decir, las “fuerzas invisibles” del espectro electromagnético afectan profundamente a todas y cada una de las facetas de la regulación biológica. (Liboff 2004, Rosen1992, Jin et al 2000,Yen-Patton et al 1998, Sivitz2000 )
Pero esto no es algo que afecte solo los bebés ,los adultos también somos extremadamente sensibles a lo que se transmite a través de la piel.
Es uno de los motivos por los cuales en las enseñanzas tántricas, entre muchos otros temas, se abordan las relaciones sexuales, pues la energía que transmitimos en esos intercambios, sin mediar la menor palabra, es potentísima y para muchos humanos, posiblemente lo más cercano a una experiencia mística que puedan experimentar, sin ni siquiera ser conscientes de ello …..
Los Yoguis han establecido una correspondencia entre los 5 primeros Çakras y los 5 sentidos.
El primero, el Çakra raíz, nuestra batería, el contacto con la tierra, corresponde al olfato, un sentido sumamente ausente y ninguneado en nuestra sociedad actual. El segundo Swadhistana, Çakra de la sociabilidad, la imaginación y creatividad está asociado al gusto: imposible ser un gran Chef sin un Swadhistana potente y equilibrado J. El tercer Çakra, Manipura, Centro del Poder, del Deber y el Honor está directamente conectado con la vista, (observad en un video de Bruce Lee por ejemplo como logra estar minutos enteros sin parpadear). El cuarto , Anahata ,Çakra del corazón ahi lo tenemos: el tacto precisamente, y el quinto Vishuda, un Çakra misterioso donde los haya, rige el habla /oído. Los otros Çakras se sitúan a niveles mas allá de los sentidos, no puedo explayarme en este Post sobre sus resonancias, pero si os interesa el tema no dudéis en contactarme y contestaré con mucho gusto a vuestras preguntas.
Volvamos a Anahata, Çakra del corazón. Desde hace milenios, el ser humano ha percibido la relación del todo directa entre tacto y sentimientos. En nuestra sociedad actual uno de los principales motivos por los que tenemos miedo a tocarnos es precisamente por el miedo a exteriorizar lo que sentimos, pánico a mostrarnos sin la mascara social que hemos adoptado, pues una de las tantas mentiras imperantes establece que la vulnerabilidad es sinónimo de perdedores y de dolor inútil. La vulnerabilidad es en realidad no solo un estado que deberíamos cultivar y agradecer infinitamente, sino el portal hacia nuestro ser verdadero; mostrarse vulnerable es prueba de honestidad, valentía y congruencia, es un paso más hacia esa entrega absoluta que nos magnifica hasta límites insospechados. Todos ellos valores ridiculizados e ignorados en el mejor de los casos.
Así nos va …..
Una de las cosas que más agradezco de los largos períodos que paso en Tailandia cada año es poder darme un mínimo de un masaje por semana, pues es algo que tienen totalmente integrado en su cultura: la tradición de los masajes. No es como en Occidente algo exótico, caro y excepcional, un lujo que nos damos muy de vez en cuando, sino algo cotidiano y totalmente asequible. Aunque obviamente sea un servicio por el cual pago, y para quienes lo efectúen se trate de un trabajo, esas mujeres siempre te transmiten una dulzura que llega mucho más allá de los efectos musculares.
Me tocan, luego existo ¡ LOL ¡
Recuerdo unas fiestas de la Mercè en Mahón en las cuales sentada en el bar del Mirador, de repente vi unos chicos y chicas abalanzarse el uno sobre el otro abrazándose y bailando. Se iban sumando más y más personas a la bola original, y en unos instantes creció de forma notable. No conocía a ninguno de ellos, pero no pude resistirme al fuertísimo impulso que sentí, y sin pensármelo dos veces me tiré al montón, abrazando quien diantres estuviera allí debajo LOL. Fueron unos instantes mágicos, eran seres muy jóvenes, sin el miedo en la piel todavía …..
Una catarsis en toda regla, subidón energético puro y duro …… “momentos kairos” en un cotidiano cada vez más y más Orwelliano …
Vivimos unos tiempos revueltos …. muy revueltos.
No se percibe claramente de que lado se inclinará la balanza: si hacia un desastre mundial ecológico absoluto, o hacia una humanidad que entrará en una Era de elevada toma de Conciencia. Todavía está por ver, de momento, ambas posibilidades son igual de reales.
Lo que si sé con toda certeza, es que cuanto más amor nos demos en general, y a través del tacto en particular, más conseguiremos cargar el platillo de la Luz …
Así que disfrutad, sed felices, y abrazaros y acariciaros todo lo que podáis 🙂
Hare Aum
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